Dale a un niño un juguete nuevo, casi cualquier juguete, y es probable que tengas un niño feliz. Los niños pequeños generalmente no son muy especiales cuando se trata de juguetes nuevos, pero los padres sí deberían serlo.
Los juguetes son más que simples juguetes y, si bien deben ser divertidos, también deben ser apropiados para la edad, estimulantes y seguros. «El juego es tan importante en el desarrollo social, mental, físico y emocional de los niños», dice Vicki Panaccione, PhD, psicóloga infantil y fundadora del Better Parenting Institute. «Los juguetes deben considerarse herramientas de aprendizaje para el desarrollo».
Cuando elijas juguetes para tu bebé, ten en cuenta los siguientes consejos:
- Que sean simples.
Cuando un juguete hace demasiado, no permite que el niño use su propia imaginación; es él quien se hacen cargo de la situación de juego, cuando el niño debería ser quien dirija la acción.
- Limita los juguetes electrónicos y los videojuegos
Vivimos en una era electrónica, y cualquier padre que crea que puede mantener a su hijo, incluso a un niño pequeño, alejado de las computadoras y cosas por el estilo para siempre, se está engañando a sí mismo. Pero para los niños pequeños, especialmente, es crucial establecer límites. Las investigaciones han sugerido que los juguetes electrónicos plantean varios peligros posibles para la salud y el desarrollo de los niños, incluida la pérdida de audición (por juguetes ruidosos), el aumento de peso (por estar inactivo mientras juega) y retrasos en el desarrollo y el lenguaje. Un estudio reciente en la Universidad de Temple mostró que los juguetes que no requieren que el niño haga nada más que mirar promueven un estilo de aprendizaje pasivo, que puede interferir con el aprendizaje de pensar de forma independiente.
La electrónica también puede afectar la capacidad de atención de un niño, dice Linda Crowe, PhD, profesora del Programa de Ciencias y Trastornos de la Comunicación de la Universidad Estatal de Kansas. «Los juguetes que tienen luces intermitentes y cambios y movimientos constantes no requieren que el niño preste atención a una sola cosa durante mucho tiempo. Los niños que usan estos juguetes con frecuencia pueden tener dificultades para concentrarse en algo como un libro o un juguete que no se mueve. . »
Según la Academia Estadounidense de Pediatría, los niños menores de 2 años no deberían mirar televisión ni jugar juegos de computadora; los niños mayores de 2 años deben tener su «tiempo de pantalla» limitado a 1-2 horas por día.