Conoce todo sobre el efecto Mozart
El efecto Mozart y tu bebé
¿Cuántas veces no hemos escuchado los beneficios que tiene la música en las personas? Escuchar música es una actividad diaria en las personas; ésta suele relajarnos, o estimularnos para realizar una actividad.
También hemos escuchado de los beneficios que tiene la música, especialmente Mozart en los bebés desde su etapa prenatal hasta su desarrollo infantil.
En primer lugar es importante conocer que desde las primeras semanas de gestación, los bebés son capaces de percibir vibraciones sonoras desde el vientre materno. Así, durante el embarazo avanza, también las capacidades del feto de percibir sonidos; ya en el quinto mes, puede escuchar los sonidos provenientes de la madre, su voz principalmente. Así como sonidos externos, para la semana 28, el bebé ya reconoce la voz del padre.
Durante estos meses, la exposición a la música comienza a generar sensaciones en el feto, desde producirle calma hasta excitación. Su capacidad cerebral de reaccionar a estímulos aumenta al grado en que en el último trimestre del embarazo, el bebé será capaz de recordar sonidos y reaccionar ante estos.
Diversas investigaciones desde los años 90, en prestigiosas universidades de Estados Unidos se han dedicado a estudiar el “Efecto Mozart”.
Muchos quizás se pregunten qué tiene de especial Mozart a comparación de otros compositores como Beethoven, Chopin, etc.
En dichas investigaciones se encontró que piezas de Mozart como la Sonata para Dos Pianos en Re mayor o los Conciertos para Violín 3 y 4 ayudan a cambiar el estado cerebral.
Gracias a las características de sus sinfonías, estas logran estimular el cerebro activando distintas hormonas y ayudando a un mejor desarrollo del bebé.
Así que no pierdas la oportunidad de mejorar el desarrollo de tu bebé con estas excelentes melodías.